Nunca me hubiera imaginado que yo acabaría haciendo un curso de profesora de español, pero ya veis las vueltas que puede dar la vida.

He estudiado una carrera científica y hasta hace un año todas las experiencias laborales que he tenido han sido dentro de un laboratorio químico. Pero el destino hizo que me trasladara a un pueblo italiano de la región de Marche en busca de un trabajo. No es una zona muy industrial, y a pesar de que yo seguía mandando curriculums a laboratorios por toda Italia, se me ocurrió que tenía algo que casi nadie de la zona donde yo vivía tenía; ¡era nativa española!

Así que empecé a poner anuncios para dar clases particulares de español y participé en sesiones de intercambio lingüísticos con personas italianas para poder mejorar mi italiano. La experiencia me gustó mucho, aunque reconozco que una cosa es ser nativa y otra muy distinta enseñar una lengua. Me tuve que repasar la gramática española para poder explicar a las alumnas de instituto la materia que daban en clase, lo cual me vino muy bien a mí también. Y al cabo de unos meses llegó la gran oportunidad gracias a la cual he pensado en formarme mejor como profesora de español e intentar abrirme otra vía profesional. Me propusieron hacer un curso de iniciación al español para jóvenes. Acepté enseguida y me lo estuve preparando durante mucho tiempo. Yo no había tenido ninguna experiencia como profesora de una clase grande, ni de español ni de ninguna otra cosa, y estaba muy nerviosa. Pero al final fue una experiencia muy enriquecedora, y tengo que admitir que Internet me ayudó muchísimo a la hora de encontrar materiales didácticos.

A raíz de esto, propuse algunos cursos de español en la universidad de adultos del pueblo donde vivo y me concedieron el de iniciación. Así que decidí formarme mejor para esta y futuras ocasiones. El curso me ha servido de mucho, y sobretodo me ha hecho reflexionar sobre el hecho de que no basta con ser nativa de un idioma para poder enseñarlo, hay que tener en cuenta muchas otras cosas para llevar a cabo una buena didáctica. También creo que un buen profesor/a nunca se acaba de formar y que se aprende sobretodo con la experiencia.

He hecho este curso porque veía una gran necesidad de formarme mejor debido a mi curriculum, y espero de todo corazón poder trabajar como profesora de español algún día, aunque sé que me queda mucho por aprender, esto sólo es el primer paso. Al menos ahora me siento más segura a la hora de preparar un curso y me planteo cosas que antes no me planteaba.