Cómo profesora, o mejor dicho, como profesora amateur, tengo mis inquietudes sobre el momento en el que me tenga que presentar frente a una clase, una clase llena de alumnos con ganas de aprender y superar unos objetivos. Todos debemos tener algún reto a lo largo de nuestra vida, y ese es el mío.
Al hacer este curso, me propuse mejorar mis aptitudes como profesora, porque mi objetivo siempre ha sido mejorar. Estamos en una sociedad cambiante, una sociedad que pide a gritos unos cambios tanto en Educación como en otros ámbitos. Pero... ¿Quién debe realizar esos cambios? La respuesta es clara y sencilla: NOSOTROS. Somos los responsables de cambiar y mejorar la realidad que nos rodea, y si para ello debemos reciclarnos y aprender nuevas metodologías, métodos de evaluación, estrategias o contenidos... ¡Manos a la obra!

Por ello decidí aprender acerca de la lengua española, para poder rellenar algunas lagunas sobre mi lengua materna que por tantos años he usado como herramienta de comunicación, pero de la que desconocía gran parte de su "encanto".

Otro aspecto que me gustaría destacar es la evaluación. Un elemento que todo profesor debe llevar a cabo, pero sobre el que no se aprende mucho durante los estudios superiores. De este elemento surge la palabra autoevaluación. Un concepto que le permite al/ a la alumn@ evaluar su trabajo y crear sus propias estrategias de mejora a partir de ese autoconocimiento. Pasamos de un aprendizaje centrado en el profesor, a un aprendizaje basado en el/la alumn@ (student centred learning). El/la alumn@ es el centro y él/ella decide sobre su aprendizaje y tiene la responsabilidad de tomar decisiones que le ayudarán a definir un proceso de aprendizaje adecuado a sus necesidades. Para ello, desarrolla unas estrategias y destrezas (escribir, leer, escuchar y hablar) basándose en diferentes metodología (naturista, comunicativa, en comunidad o bilingüe).

Para terminar, en relación a la autoevaluación y al autoconocimiento, me gustaría comentar lo sorprendida que me dejan algun@s alumn@s (desde mi poca experiencia) en cuanto a sus responsabilidades, esfuerzos, ganas, capacidades... Estoy segura de que se puede aprender de los alumnos; es más, se debe aprender de l@s alumn@s. Hace poco vi una conferencia en TED Talks (pagina recomendable para todo docente) de la ponente Adora Svitak (2010), y me hizo reflexionar sobre la autonomía, iniciativa y creatividad que los niños demuestran hacia su aprendizaje y que los adultos debemos reconocer. A eso se le llama motivación y pasión, y es lo que todo docente debe desarrollar para transmitir sus conocimientos y experiencias (educar).